El Maitake, conocido por su nombre científico Grifola frondosa, es uno de los hongos medicinales más populares ya que forma parte de la tríada compuesta por Reishi, Maitake y Shiitake, empleada en la medicina tradicional como tónicos de la salud por su calidad de adaptógenos. También es un apreciado comestible en China y Japón, donde se utiliza con fines medicinales desde hace siglos. Entre los nombres más populares encontramos el de ‘Gallina de los Bosques’, ‘Cabeza de Oveja’, ‘Seta de Río’ o ‘Hui zhu hua’.
En realidad, el nombre japonés Maitake significa literalmente ‘Seta Bailarina’, lo que podría deberse a su peculiar forma. Y es que está compuesto por un conjunto de pequeños carpóforos soldados entre sí que le dan aspecto de conjunto floral bien ordenado sobre un eje. De este, destacan sus sombreros superpuestos, de color pardo-grisáceo, que forman un mosaico en forma de abanico como en las danzas tradicionales japonesas.
Por último, no podemos olvidar que esta seta es típica del otoño, apareciendo con la llegada de las primeras lluvias sobre tocones de árboles cortados. Su cuerpo fructífero es de gran tamaño, pudiendo alcanzar los 20 kg de peso y los 60 cm de altura.
Contiene beta-glucanos, inmunomoduladores de origen fúngico, cuya estructura es más compleja que la de los presentes en cereales como la avena. Con todo, esta estructura está directamente relacionada con su acción.
Además contiene lectinas, enzimas, provitamina D, vitaminas ーsobre todo del grupo Bー y minerales importantes como el magnesio, el fósforo y el potasio. En resumen, su perfil nutricional es muy interesante, al igual que sus moléculas bioactivas, esenciales para muchas funciones biológicas.
Uno de los beneficios más conocidos del hongo maitake es su capacidad para ayudar a controlar el colesterol y la presión arterial. Un estudio realizado en 2005 encontró que el consumo de hongo maitake puede ayudar a disminuir los niveles de colesterol y la presión arterial en personas con niveles altos de ambos (1). Otro estudio realizado en 2010 también encontró que el hongo maitake puede ser beneficioso para mejorar la función del sistema cardiovascular (2).
En realidad, el nombre japonés Maitake significa literalmente ‘Seta Bailarina’, lo que podría deberse a su peculiar forma. Y es que está compuesto por un conjunto de pequeños carpóforos soldados entre sí que le dan aspecto de conjunto floral bien ordenado sobre un eje. De este, destacan sus sombreros superpuestos, de color pardo-grisáceo, que forman un mosaico en forma de abanico como en las danzas tradicionales japonesas.
Por último, no podemos olvidar que esta seta es típica del otoño, apareciendo con la llegada de las primeras lluvias sobre tocones de árboles cortados. Su cuerpo fructífero es de gran tamaño, pudiendo alcanzar los 20 kg de peso y los 60 cm de altura.
Contiene beta-glucanos, inmunomoduladores de origen fúngico, cuya estructura es más compleja que la de los presentes en cereales como la avena. Con todo, esta estructura está directamente relacionada con su acción.
Además contiene lectinas, enzimas, provitamina D, vitaminas ーsobre todo del grupo Bー y minerales importantes como el magnesio, el fósforo y el potasio. En resumen, su perfil nutricional es muy interesante, al igual que sus moléculas bioactivas, esenciales para muchas funciones biológicas.
Uno de los beneficios más conocidos del hongo maitake es su capacidad para ayudar a controlar el colesterol y la presión arterial. Un estudio realizado en 2005 encontró que el consumo de hongo maitake puede ayudar a disminuir los niveles de colesterol y la presión arterial en personas con niveles altos de ambos (1). Otro estudio realizado en 2010 también encontró que el hongo maitake puede ser beneficioso para mejorar la función del sistema cardiovascular (2).
Además, el hongo maitake también se ha demostrado que tiene propiedades inmunomoduladoras, lo que significa que puede ayudar a fortalecer el sistema inmunológico del cuerpo. Un estudio realizado en 2007 encontró que el hongo maitake puede mejorar la función inmunológica en personas con cáncer (3).
Otra área en la que el hongo maitake ha demostrado ser beneficioso es en la lucha contra el cáncer. Un estudio realizado en 2002 encontró que el hongo maitake puede ayudar a reducir el tamaño de los tumores en ratones con cáncer de mama (4). Otro estudio realizado en 2004 también encontró que el hongo maitake puede tener un efecto inhibidor sobre el crecimiento de células cancerosas en personas con cáncer de pulmón (5).
Aunque hay evidencia de que el hongo maitake puede tener beneficios para la salud, es importante tener en cuenta que aún se necesitan más investigaciones para confirmar estos hallazgos. Además, es importante hablar con un médico o un profesional de la salud antes de comenzar a tomar cualquier suplemento de hongo maitake o cualquier otro tipo de hongo.
Referencias:
Nakamura, Y., et al. (2005). Efecto del hongo maitake (Grifola frondosa) en el colesterol y la presión arterial en personas con niveles elevados. Journal of Nutritional Science and Vitaminology, 51(5), 323-329.
Koda, Y., et al. (2010). Efecto del hongo maitake (Grifola frondosa) en la función inmune